21 mayo 2006

Regreso a 1993

Esto es lo que he sentido este fin de semana, cuando un amigo me ha prestado todas las temporadas de "Expediente X" en DVD. Recuerdo esperar pacientemente los lunes por la noche a que terminara "Policías de Nueva York" o "Walker. Texas Ranger" para recibir mi dosis diaria de conspiraciones alienígenas, monstruos devora-hombres, fantasmas cabreados y, sobre todo, de esa relación tan bien llevada entre los agentes del FBI Fox Mulder y Dana Scully.
Lo mejor de todo era como todos estos elementos, que parecían sacados de películas de terror de serie B, se unían con una manera de narrar y una mitología (la Conspiración, el Sindicato, el Cáncer Negro) que debían mucho a los thrillers políticos de los 70 y, sobre todo, a "Todos los hombres del presidente". Esta circunstancia la elevaba por encima de la media, y fue realmente lo que propició su entrada como una bocanada de aire fresco a principios de los 90, incluso aunque, al principio, Fox confiara más en "Las aventuras de Brisco County" que en "Expediente X". Sin embargo, las repeticiones veraniegas empezaron a fomentar el culto de los x-philos, que se desataría definitivamente, y con todo su poder, en la tercera temporada.
Así que, después de que la serie terminara con el nuevo milenio, me resulta curioso que resurjan las noticias de que habrá secuela de la película de 1998. Frank Spotnitz, productor y guionista de la serie, está escribiendo el guión y, al parecer, éste va a ser más como un capítulo suelto de la serie, sin relación con la Conspiración para que los extraterrestres invadan el planeta. He de decir que esos episodios eran los que a mí más me gustaban, así que, por ese lado, me van convenciendo.
Y, por cierto, efectivamente los dos actores que aparecían en "Hielo" eran Felicity Huffmann ("Mujeres desesperadas", "Transamerica") y Xander Berkeley (el primer jefe de Jack Bauer en "24", y el sheriff en algunos capítulos de "CSI"). No era un mal capítulo ése. La claustrofobia del encierro forzoso, y la paranoia por las extrañas muertes, estaban bien contadas, y es uno de los primeros momentos en la serie en los que la tensión sexual no resuelta (me encanta esa expresión, je, je) entre Scully y Mulder se puede cortar un cuchillo.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Cierto, los mejores episodios eran prácticamente remakes de películas de serie B pero infinitamente mejor rodados.

Lástima que toda la historia conspiranoica estuviera tan mal planificada, cayendo en el síndrome que aqueja a tantas series sobre misterios más o menos sobrenaturales: todo queda muy resultón al principio, cuando puedes limitarte a mostrar 'destellos' del misterio, pero tarde o temprano tienes que empezar a mostrar tus cartas, y el encanto se esfuma (lo mismo que le está pasando a "Perdidos"). De hecho, se resistieron con dientes y uñas a mostrar sus cartas, y la serie también se resintió de ello. Era como ver una obra de teatro con veinte primeros actos.

Unknown dijo...

Por eso yo prefiero los episodios sueltos. Además, en ellos siempre aparecían unos secundarios memorables, y daban pie a los mejores diálogos entre Mulder y Scully (recuerdo ahora uno encima de una roca en medio de un lago).

Anónimo dijo...

A mí también me gustaban más los episodios sueltos (los de la conspiración, sobre todo en las primeras temporadas, me aburrían).

Pero no sé por qué, en el principio de la 8a temporada (la estoy viendo ahora, me quedé en la 7a gracias a Tele5 :P), cuando la búsqueda de Mulder, me sobran los capítulos sueltos... Supongo que serán las ganas de saber qué pasa con Mulder.

salu2

Loco Por La Tele dijo...

El problema de toda la historia de la conspiración fue que los propios guionistas no tenían ni idea de qué pasaba, y se limitaban a tirar por donde se les ocurría. Por eso, cuando se decidían a dar alguna respuesta, además de resultar anticlimática dada la larga espera, planteaba todo tipo de contradicciones.

En cuanto a la segunda película, cada varios meses sale alguien que dice que está en marcha, pero nunca sale nada adelante. A ver si esta vez es distinto. Y a ver cómo plantean la peli, porque el final de la serie dejó a los personajes en un punto complicado de retomar sin dar explicaciones.

Álex dijo...

Que tiempos, recuerdo que la comencé a ver hacia la segunda temporada a escondidas porque mis padres no me dejaban (decían que luego me iba a dar miedo y no iba a poder dormir... y alguna vez lo consiguió) Hace unos meses me hice con la primera temporada y la tercera... que recuerdos.
A mi los episodios de la conspiración me gustaban y los sueltos también, lo malo como bien decís es que al final lo liaban tanto que ya no tenían coherencia las cosas. Ahora me queda por ver las dos últimas temporadas que me las bajé. A ver si en verano que están paradas las series que sigo regularmente saco un hueco. Y descubro que narices pasa finalmente con los extraterrestres y con Mulder y Scully.

françois burén dijo...

La estiraron demasiado y se rompio. A partir de la quinta temporada perdió todo el interes

Unknown dijo...

Totalmente cierto. Aún siendo muy friki, la sexta temporada ya empezaba a desbarrar de forma seria (y eso que yo me la tragué religiosamente y vi el último capítulo de la serie gracias a Internet.)