¿Quién vigila a los vigilantes?

La historia de la adaptación al cine del cómic de Alan Moore y Dave Gibbons "Watchmen" es casi tan enrevesada como la propia trama del libro. Desde que éste se publicó, originalmente como una serie mensual de 12 episodios entre 1986 y 1987, mucho se ha hablado sobre posibles proyectos, en un principio bajo los auspicios de Paramount, proyectos que ni siquiera llegaron a la fase de la elección del reparto. A ellos se han unido una larga nómina de posibles directores que incluye a Terry Gilliam, Darren Aronofsky y Paul Greengrass, que luego se caían del proyecto tan pronto como sonaba su nombre. Y eso que, de los tres, Aronofsky reconoce la influencia que el cómic ha tenido en él, y Greengrass parecía un nombre seguro hace un par de años. También el anuncio de que, por fin, se empezaba a rodar "V de Vendetta" (otro cómic de Moore con un tortuoso paso al cine) pareció abrir los nubarrones que se han cernido siempre sobre la película de "Watchmen", para luego volver a cerrarlos con el anuncio de que Paramount vendía sus derechos sobre la obra a Warner (el estudio responsable de "V de Vendetta") y que todo volvía a empezar.
Ahora, y si hacemos caso a Internet Movie Database, parece que los Vigilantes por fin están en el camino de asaltar la pantalla grande. El director elegido es Zack Snyder, que debutó con "Amanecer de los muertos", remake de una película de George A. Romero, y que ahora está enfrascado en otra adaptación de un cómic, en este caso de Frank Miller, "300", sobre la batalla del Paso de las Termópilas. El guión está reescribiéndolo, según este artículo de Wikipedia, Alex Tse, sobre un primer trabajo de David Hayter, coguionista de las dos primeras entregas de "X-Men", que parece que es el preferido de Alan Moore (si bien ya sabemos de la alergia de Moore por las adaptaciones al cine de sus obras). ¿Llegará este proyecto a buen puerto?
Lo cierto es que "Watchmen" es un libro difícil de trasladar a una película, y no sólo por el libro en sí. Es el único cómic que ha ganado el prestigioso premio Hugo de ciencia ficción, en 1988, el que sentó las bases de una nueva manera de ver a los superhéroes que puede apreciarse incluso en películas recientes como "Batman begins" y su sombra es verdaderamente alargada; como puede verse en este pequeño artículo de Entertainment Weekly, reconocen su influencia gente como Richard "Donnie Darko" Kelly, Joss Whedon o Neil Gaiman ("The Sandman"), y también puede apreciarse en algunos aspectos de "Perdidos" (que es una batidora de todo tipo de influencias) y "Los Increíbles".
La dificultad que proviene del cómic en sí es que le anda a la zaga a "V de Vendetta" en cuanto a subversión, el nivel de referencias históricas, literarias y filosóficas es muy amplio (More llega a citar a "Moby Dick" y William S. Burroughs como sus influencias), el tono es siempre inquietante y desasosegante (sobre todo al final), y sus personajes tienen más capas de gris de las que a cualquier major de Hollywood le gustaría. Ambientado en unos años 80 alternativos, en los que Richard Nixon todavía es presidente de EE.UU. y el mundo va abocado directamente a la Tercera Guerra Mundial, explota brillantemente la paranoia y desconfianza típicas de la Guerra Fría y dibuja unos superhéroes corroídos por dudas éticas y morales, psicopatías varias y delirios de grandeza, seres humanos, al fin y al cabo, que decidieron conscientemente convertirse en Aventureros Enmascarados. El verso del poeta latino Juvenal que se utiliza para dar título al cómic explica claramente por dónde van los tiros: "Pero, ¿quién vigilará a aquéllos que vigilan?"