23 enero 2008

Cuando el destino nos alcance

La muerte de Heath Ledger ha dejado frío a todo Hollywood. Nadie se la esperaba, y nadie se la explica. Viene, además, una semana después de que otro actor joven, Brad Renfro, fuera encontrado muerto también en su casa. Dejando de lado las especulaciones sensacionalistas sobre las causas de ambas muertes, el fallecimiento de Ledger ha impactado con más fuerza si cabe al mundo del cine por la interesante carrera que se intuía ante él y las puertas que podía abrirle interpretar al Joker en "The Dark Knight", la secuela de "Batman begins" que se estrenará el próximo mes de julio.

Que yo recuerde, en ese aspecto guarda algunas similitudes con la muerte de otro joven actor que prometía llegar muy alto, River Phoenix. Su carrera estaba en la rampa de lanzamiento después de haber sido el joven Indy en "Indiana Jones y la Última Cruzada" y tras haber compartido planos con Robert Redford en "Sneakers", y su protagonismo en "Mi Idaho privado" le había granjeado la simpatía de los críticos. Esa simpatía hacía tiempo que la tenía Heath Ledger, y se había cimentado con más fuerza después de su impresionante trabajo en "Brokeback Mountain", una película cuyo ritmo estaba muy condicionado por la emoción minimalista, y muy palpable, del personaje de Ledger.

Sirva como recordatorio esta entrada de Alan Sepinwall en la que se recuerda el breve pasado televisivo de Heath Ledger en "Roar", una serie tipo Xena de mediados de los 90; y aquel genial momento de "10 razones para odiarte".

6 comentarios:

Anónimo dijo...

totalmente, pero también hay que recordar la mala suerte de Gilliam que en su proberbial desventura se le murió su actor principal (es Lost in la Mancha una vez mas).

Unknown dijo...

Cierto, lo de Gilliam es increíble. ¿Quién le habrá echado el mal de ojo? Porque si no, no se explica.

Sunne dijo...

uuna lastima, pobre chaval en Joker promete mucho...

Fon dijo...

muy fuerte... me quede helado al leerlo ayer.

Crítico en Serie dijo...

Su muerte realmente ha sido una gran pérdida. Y grande era, consiguiendo abandonar este mundo a los 28 años y con una digna carrera a sus espaldas. Quién lo diría, cuando uno le ve interpretando a Ennis del Mar, que entonces debía tener 25 años. La verdad es que para mí ya ha conseguido el estatus de mito, la verdad.

Yo estoy aprovechando estos días de exámenes para descubrir parte de su filmografía que no había visto. Compradas están Candy (muy interesante película sobre la drogoadicción), Destino de Caballero (qué insufrible, pese a estar él increíblemente guapo!) o Las Cuatro Plumas (que tocará mirar esta noche).

Sí, algunos lo llamarían obsesión, pero yo prefiero decir que es mi homenaje a un chico que parecía haberlo conseguido todo con sus 28 años.

Adri dijo...

en fin, que voy a decir que hayáis dicho. Es una pena y personalmente he visto todas sus pelis (menos las cuatro plumas)y le tengo mucho cariño desde 10 razones para odiarte..

¿porqué se empeñan en vivir tan rápido? No se.. yo no le veía del tipo de meterse drogas hasta quedarse ciego (o morir) no se...

PD: en la EW de esta semana le han dedicado un especial y la portada.. y la foto que han elegido es horrible. Se proqué han elegido esa,pero es horrible.