29 julio 2008

La receta para lograr un Emmy

Entre los muchos temas que surgieron en la mini-quedada teléfila del domingo (sí, veré "The Office", de verdad), inevitablemente tenían que aparecer los Emmys, su peculiar manera de elegir a los candidatos y esa costumbre suya tan irritante de votar siempre a las mismas series y los mismos actores. Navegando hoy por la blogosfera, he llegado a un curioso recordatorio de Gold Derby de la escasa suerte que tuvo siempre "Expediente X" con los Emmys, aunque en los Globos de Oro era una de las favoritas. En realidad, estuvo nominada muchas veces a las categorías importantes de las estatuillas aladas, pero aparte de por aspectos técnicos, tipo maquillaje, efectos especiales y cosas así (y el guión de "El descanso final de Clyde Bruckman"), nunca consiguió ganar ninguno de los "grandes".

Hasta 1997, cuando la opción de victoria que parecía más remota terminó cristalizando, sobre todo, porque el episodio que se envió como "prueba" lo tenía todo para convencer a los votantes. Entre las favoritas de ese año como mejor actriz dramática estaban Julianna Margulies y Sherry Stringfield ("Urgencias") y Christine Lahti ("Chicago Hope"), pero fue Gillian Anderson la que se llevó el gato el agua porque la academia juzgó su trabajo en "Memento Mori", el capítulo en el que Scully ha de enfrentarse a un cáncer inoperable y que parece ser terminal. ¿Por qué Mary McDonnell consiguió este año colarse entre las 10 semifinalistas en esa misma categoría? Porque el capítulo que envió fue "Faith", en el que Roslin ha de afrontar su propia mortalidad y sus creencias en si hay otra vida después de ésta durante la peor parte de su tratamiento contra el cáncer.
Siempre que James Spader ha estado nominado al mejor actor por ser el abogado Alan Shore ha ganado (tres veces, dos por "Boston Legal" y una por "El abogado"), y sus victorias se han cimentado siempre en grandes alegatos finales en los juicios en los que puede lucirse a gusto. Mariska Hargitay se beneficia de que, con los casos delicados que trata "Ley y orden: Unidad de Víctimas Especiales", siempre hay alguno que su detective Benson se va a tomar más a pecho, como algo personal, lo que redundará en alguna escena en la que pueda mostrar sus dotes dramáticas. Si Felicity Huffman se presentara a actriz dramática en lugar de cómica, alguno de sus capítulos del principio de la cuarta temporada de "Mujeres desesperadas" le podría haber conseguido una nominación (estoy pensando en aquéllos en los que la vemos ponerse la peluca e intentar ocultarle su enfermedad a todo el mundo, o en el que se obsesiona con matar a una musaraña, para llorar amargamente una vez que lo consigue).

Si el reconocimiento a todo tu trabajo de una temporada depende de un único episodio, debes elegir bien el que envías a los Emmys. Lauren Graham nunca consiguió ganar porque nunca acertaba con el capítulo (es una injusticia que nunca entenderé), y algunos críticos apuntan que, si en lugar de "Man of science, man of faith", los productores de "Perdidos" hubieran enviado "The other 48 days" (más autoconclusivo), habrían conseguido una nominación a mejor drama en su segunda temporada. En su lugar, dieron la sorpresa al quedarse fuera de esa categoría, a pesar de ser la "defensora del título".

8 comentarios:

Diego del Pozo dijo...

Yo siempre dire que esto de lso Emmys es una injusticia pero mientras no cambien el sistema no hay mas remedio que aguantar y ver como ganan los mismos un año tras otro.

Lo que no sabia era lo de Lost...interesante curisodidad.

PD: Yo no fui a la quedada pero...tienes que ver the Office!!!!!!!!

Un saludo Macguffin!!!!

Unknown dijo...

Ya, todo el mundo me lo dice, pero es que soy una vaga... Va, "The Office" se coloca la primera de la lista.

Kike dijo...

A mí siempre me ha parecido un poco injusto éso de que las nominaciones a los Emmy sean por un capítulo y no por una temporada entera. Y como dices, hay que saber elegir el capítulo. Por mucho que hayas hecho una temporada excelente, si el capítulo que mandas es un poco flojo, tienes muy pocas posibilidades de ser seleccionado.

En cuanto a Felicity Huffman, tienes toda la razón. Aunque yo quizás destacaría la escena en la que sale al patio a gritar y llorar después de enterarse de que ya no tiene cáncer.

Por cierto, me alegro de que le des una oportunidad a The Office. Espero que la veas en VO, porque el doblaje es lo peor que he visto en mucho tiempo... Si no me crees, échale un ojo a los capítulos que emite laSexta por la tarde. ;)

Craig Gilligan dijo...

Yo tampoco he visto The Office :S Aunque la tengo en "pendientes".

En el capitulo "Memento Mori" Gillian Anderson se luce. La verdad es que es uno de los que más me gustan... Lo cierto es que los capitulos Scully-céntricos siempre me han parecido tener algo especial. Aunque en este Mulder también acaparaba bastante atención con su busqueda sin descanso de una cura para su compañera.

Adri dijo...

Ya sabes mi posición ante los emmy y todo tipo de premios.. ha llegado un punto en el que no me quiero rayar con el tema porque me enervo.. y la enervación pasa a frustración y a cabreo..

Y lo de Lauren Graham nunca lo vas a entender porque no tiene explicación racional.


PD: SI, ve the Office ya!

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con lo de Felicity Huffman, que es una grandísima actriz dramática. No hay más que ver Transamérica para comprobarlo.

Unknown dijo...

Craig, Scully siempre fue, como personaje, más interesante que Mulder. Hasta David Duchovny decía que ella era su personaje favorito.

Crítico en Serie dijo...

The other 48 days para mí es uno de los mejores episodios de la serie. Su inicio te deja sin aliento: esa cola estrellándose contra la cámara...

Estaba perfectamente realizado. Uno de los mejores llevados.