23 junio 2010

Las pesadillas de la guerra

ALERTA SPOILERS: Pretendía hablar de "The Pacific" sin destripar nada importante de la trama, pero no sé si va a ser posible, y ya lo hice cuando la serie andaba por su ecuador. Eso sí, que Japón acabó rindiéndose y que los estadounidenses sufrieron muchísimas bajas en Iwo Jima es historia, no son spoilers.

Prefiero "Hermanos de sangre" a "The Pacific". Vamos a soltarlo ya y así nos lo quitamos de enmedio. No sabía explicar muy bien porqué (aquí hay algunas razones de otro punto de vista), y sospecho que es más un tema emocional, de conexión con esos personajes, que intelectual. Paradójicamente, "The Pacific", que sólo se centra en tres personajes, me ha resultado más dispersa que "Hermanos de sangre", que seguía a toda una compañía. Sin embargo, la segunda tenía un objetivo en lontananza más claro (el avance hacia Berlín), mientras la primera, por diseño, carece de él. La campaña del Pacífico se peleó de isla en isla, sin un objetivo tan claro (creo que hasta bastante avanzada no se decidió invadir Japón), todas con un clima tropical inclemente con los marines y defendidas con una ferocidad inaudita para ellos por parte de los japoneses, por lo que ya impone unas directrices a la narrativa que no está obligadas al contar la campaña en Europa.

No obstante, a veces se ha echado de menos más continuidad con los personajes. O a lo mejor es que Eugene Sledge, el que más ejemplifica cómo la guerra afectó a los soldados al volver a casa, no terminó de convencerme, y a Leckie y Basilone, sobre todo a éste último, no los vimos lo suficiente. Las motivaciones detrás de la serie son muy ambiciosas, pues Tom Hanks, Steven Spielberg y el resto de responsables pretendían abarcar gran parte del frente del Pacífico y de las peripecias de los marines a partir de esos tres hombres, y quizás por eso se ha perdido un poco de foco. Pero no ha estado exenta de interés. Las batallas, desde luego, eran más encarnizadas y estaban rodadas de tal modo, que te metían dentro de la acción, y esa sensación de repetición de la que se han quejado algunos espectadores nos ayuda también a entender un poco el estado mental de los marines.

Los tres últimos episodios, con los últimos pasajes de la vida de Basilone, incapaz de asumir su papel de "héroe" en casa mientras sus compañeros mueren en el frente, el paso definitivo de Sledge al lado oscuro en la salvaje batalla de Okinawa (para recuperar su humanidad, ya rota, a última hora) y el difícil ajuste a la vida cotidiana de Eugene y Leckie al final de la contienda son los que más acertadamente han contado el precio psicológico y emocional que tuvieron que pagar por participar en la guerra. Curiosamente, los dos que se alistan con el conflicto empezado son los que sobreviven, mientras que el militar de carrera muere (condecorado dos veces, pero de poco le sirve). El inicio y el cierre de la serie ha estado mejor que el tramo intermedio, aunque en ése hemos empezado a conocer a uno de los mejores personajes de "The Pacific", Snafu, que esconde más en su interior que su fachada de aparente desalmado que les roba los dientes de oro a los japoneses muertos.

Supongo que Spielberg y Hanks terminarán aquí sus colaboraciones sobre la Segunda Guerra Mundial, pero de repente tengo curiosidad por saber cómo sería una miniserie centrada en la campaña del norte de África, donde los panzers de Rommel campaban a sus anchas hasta que llegó Montgomery, y ese ambiente colonial creo yo que puede dar mucho juego.

8 comentarios:

satrian dijo...

Esta mañana comentaba yo, lo de una tercera con el Norte de África como protagonista, por pedir que no quede.
Se supone que el objetivo es Japón, pero plasman perfectamente lo caótica que fue esta campaña del Pacífico, por eso incluso nosotros nos perdemos de isla en isla.
Sigo resaltando los maravillosos tres últimos capítulos, y también me gustó más Band of Brothers, y tampoco se explicar bien porqué.

Anónimo dijo...

Pues para mí, lo bueno sería que se pusiesen en el otro lado. Como ya hizo el incomensurable Eastwood en Cartas desde Iwo Jima, que por cierto creo que le salió mucho mejor que la de las banderas. Es decir, porque no narrar la retirada de una compañía de Panzergrenadier desde su máximo avance en el frente oriental hasta la debacle en Berlín.

O por qué no seguir a los reclutas de reemplazo japoneses en las selvas de Filipinas.

No sé. A mí me interesaría más ver como se vio la guerra desde el otro lado.

LiPooh dijo...

Yo no sabría con cuál quedarme. Cierto es que en BOB todo está más centrado y tienen una misión clara que contar, pero también lo es que en mic aso Sledge sí me ha ganado. Creo que en el fondo la intención era plasmar las heridas emocionales de la guerra y no tanto un retrato de la batalla como en BOB.

A pesar de todo, muy excelentes series.
Saludicos.

Spidermarga dijo...

Como tú, me quedo con Hermanos de sangre (a la que soy incapaz de verle fallos). No me ha gustado lo dispersa que ha estado The Pacific con los personajes. No puedes ignorar a Sledge la primera parte de la miniseri y que tengo todo el protagonismo al final y hacer lo contrario con Leckie. Además, para 3 personajes principales que había, Sledge tardó tiempo en gustarme y con Basilone no terminé de encariñarme nunca (en parte culpa del actor, que no me parecía acertado). Leckie fue el único que sí me convenció desde el principio, lo mismo que Snafu, muy interesante.

Además, me pareció un error que sólo nombraran el tema de la bomba atómica ¡ya podrían haberse mojado un poco más!

De todas formas, muy buena miniserie y muy recomendable.

Warren Keffer dijo...

Más o menos estoy con lo que dice todo el mundo: es en general muy buena, pero no tanto como Band of Brothers y decepciona en muchos aspectos, como los personajes o la línea narrativa dispersa.
Pero la realización y algunos capítulos inmensos la salvan bastante bien.

Bonito nuevo diseño. Ganaría más si el texto estuviera justificado :)

rube dijo...

Buen articulo. A mi tambien me ha gustado mas Band of Brothers. Es menos dispersa y conecte mas con sus personajes.

Muy buena la idea de hacer una tercera serie ambientada en Africa. Podria dar mucho juego

Jaime Grau dijo...

Yo no me di cuenta hasta el final que esos tres eran los protagonistas, el principal problema que he tenido en esta serie han sido los personajes, me cuesta mucho hacerme con sus caras (y me cuesta más si encima van todos vestidos igual) y por eso creo que debería volver a ver la serie para disfrutarla plenamente ahora que ya identifico a los personajes.

Nahum dijo...

Uy, no me acordé de citar a Snafu. Es verdad: es un personaje delicioso, pues acaba siendo mucho más que un sádico.

Y lo que dice Satrian suena bien: ese frente con Rommel y cía. Pero quizá ocurre como con The Pacific, que puede haber cierta saturación narrativa y estilística.