09 agosto 2011

Todos eran Tara

AVISO SPOILERS: No se puede hablar con propiedad de la tercera temporada de "United States of Tara", y de su final como serie, sin destripar algunas cosas importantes, así que ya sabéis cuál va a ser la tónica de esta entrada.

El anuncio de Showtime de que cancelaba "United States of Tara" y renovaba "Nurse Jackie" suscitó muchs comentarios en su momento sobre si las series de la cadena iban a alguna parte o repetían siempre la misma fórmula. En la gira veraniega de la TCA, el presidente de Showtime justificó el cierre de la serie (aparte de por cuestiones de audiencia) diciendo que no sabían hacia dónde podía ir después del final de su tercera temporada, lo que parece dar un poco la razón a quienes critican la cadena por esa sensación de repetición. Una cosa que siempre ha distinguido "US of Tara"es justo esa imprevisibilidad y ese continuo movimiento hacia adelante. En las tres entregas que hemos visto, su personaje central se ha explorado siguiendo sus intentos de cambiar y mejorar, y con esa exploración han ido cambiando  los secundarios a su alrededor y el tono general de la serie.

"Tara" nunca fue una comedia, aunque dure 25 minutos, y en el último tramo se ha visto claramente que podía ser muy seria si quería. Y a veces sí quería. En los capítulos de cierre de la segunda temporada, Alice llegaba a dar un poco miedo, y la aparición de Bryce ha sido realmente inquietante. Sacaba a la luz una zona oscura de la propia Tara que era peligrosa, y servía para que, finalmente, la situación familiar estallara, desde el sacrificio de Max (autoimpuesto porque su padre abandonó a su madre casi agorafóbica), a la rebelión de Marshall o a los sucesivos intentos de Kate de salir de casa (una subtrama muy divertida), sólo para acabar volviendo para poder cuidar de su hermano. Los dos hijos de los Gregson han tenido 12 capítulos de gran crecimiento y han ejemplificado perfectamente lo difícil que es convivir con la enfermedad de Tara, cómo es una gran carga que no puede tratarse a la ligera.

Y desde el final de la primera temporada, cuando Tara decide averiguar de una vez por todas el origen de su trastorno disociativo de personalidad e intentar encontrar un método que le permita controlarlo, la serie no ha tenido miedo de explorar que esa búsqueda significa desenterrar secretos familiares muy oscuros, las dudas de Tara sobre la medicación (que evita sus transiciones a sus alter egos pero también la deja como si estuviera constantemente emporrada), y el riesgo que implica que alguna de sus personalidades asuma el control en momentos en los que es Tara la que debería estar apoyando a su familia, como en el funeral de Lionel. Su intento de acabar con Bryce tirándose al río es el punto más bajo al que llega una Tara que sí tenía más cuerda para una cuarta temporada, si bien ésta tendría que haber sido muy diferente de lo que habíamos visto hasta ahora. Aun así, el final ofrece un cierre satisfactorio para casi todos los personajes y para su propia protagonista también, pues su viaje a Boston para ver al psiquiatra que le recomienda Hatteras está lleno de dudas, pero lo preside la esperanza de algo mejor.

Es también una pena que los Emmy se hayan olvidado por completo de "US of Tara" justo este año, porque merecía mucho más las nominaciones que sus vecinas de cadena que sí las tienen, como "Nurse Jackie" y "The big C". Todo el reparto se ha superado esta temporada, con mención especial para John Corbett y Keir Gilchrist, y Toni Collette ha seguido en su gran línea, dejando un buen dúo con un Eddie Izzard que lo mismo resultaba gracioso que nos servía para darnos cuenta de la gravedad de la situación. Al final, hasta echaré de menos a los alters, que se conjuran para salvar a Tara de Bryce, sin éxito, y es una nota simpática que estén los tres originales (Buck, Alice y T) magullados y heridos en la camioneta con Tara y Max cuando se marchan a Boston. Todos formaban parte de ella, todos eran distintos lados de su personalidad. Pero Tara necesita también que, como dicen en la canción de Supertramp que cierra la serie, "The logical song", alguien la ayude a saber quién es.

5 comentarios:

Crítico en Serie dijo...

Lo curioso es que tardamos bastante en conocer a Tara, pues ella era 'ese personaje que quedaba cuando no había un alterego por allí', lo que diría que era un defecto garrafal. Sin embargo, me gustó mucho Alice durante toda la serie. No dejaba de ser una Bree Van de Kamp (que a su vez es una adaptación de las amas de casa de los cincuenta).

Unknown dijo...

No era un defecto, era parte de la evolución de la serie, pero entonces no podía saberse. A mí siempre me resultó muy divertido Buck, la verdad.

OsKar108 dijo...

Una buena serie, que vista en perspectiva global (como un todo) me parece un poco mejor aún que vista por capítulos o temporadas individuales.

¡Saludos!

Agustín dijo...

Se que no es el lugar adecuado pero por twitter no se me permite escribirte solo quería agradecerte la mención a Despotricando TV sobre Fallng Skie.
Un saludo.

Un telespectador más dijo...

A mi me pasa como a Oskar, que valorandola en conjunto me deja muuy buen sabor de boca, sobretodo gracias a esta maravillosa tercera temporada, con un Bryce soberbio.

El final despues de todo ha estado muy bien, para ser un final de temporada sin más. Podrian habernos ofrecido una cuarta temporada quie cerrase todo mejor, si, pero aun asi yo estoy satisfecho con el resultado general.

Saludos!