20 noviembre 2006

Scorsese, a toda pastilla


Los remakes son harto peligrosos, pero a Hollywood le encantan, sobre todo si se hacen de películas extranjeras de gran éxito. Esto no es nuevo, claro, y tampoco es nuevo que las versiones estadounidenses pinchen en hueso. No he visto "Infernal affairs", el thriller de culto de Hong Kong en el que se basa "Infiltrados", la última película de Martin Scorsese en la que abandona los dramas de época tipo "Gangs of New York" y "El aviador" y vuelve al cine airado y nervioso de sus títulos de gángsters italo-americanos, pero ésta última es muy recomendable y se sale de esa tendencia empobrecedora de los remakes.
No es que "Infiltrados" sea como "Uno de los nuestros", pero está bastante bien. Tiene ritmo, está bien rodada, la acción pasa a toda velocidad (lo que no es moco de pavo para una película que dura más de dos horas) y al final no se hacen concesiones a la galería. Todos los personajes son igual de duros, con su propia moral y ética, y actúan en todo momento siguiendo sus dictados.
Además, y sin que sirva de precedente, Leonardo DiCaprio está muy bien, sin histrionismos (para eso ya está un Jack Nicholson pasado de rosca) y todo el reparto está muy bien conjuntado. Vale que, con Marty, yo no soy especialmente imparcial, pero les demuestra a todos los directores modernillos que quien tuvo, retuvo. Y vaya si retuvo.

2 comentarios:

Edu dijo...

Aunque me quedo con Infernal Affairs (quizás por haberla visto antes), me lo pasé muy bien con Infiltrados, que de eso se trata al fin y al cabo. Me sorprendió Mark Wahlberg, aunquee tiene un papel muy agradecido (como el de Alec Baldwin) y de los protas también me quedo con Di Caprio.

Unknown dijo...

Es que Baldwin se ha especializado últimamente en secundarios muy resultones, como el de The Cooler, con William H. Macy, o el que a mí más me gusta, el que hace en State & Main, de David Mamet. Y él los aprovecha al máximo.