02 diciembre 2007

La vida de Charlie

El género policial debe ser el más prolífico en cuanto a nuevas series de televisión. Desde los procedimentales a lo "CSI", pasando por las series corales en las que lo importante son los policías, más que las investigaciones (como "Canción triste de Hill Street"), hasta las centradas en un detective peculiar que resuelve los casos más extraños, como "Colombo". "Life" es un poco una mezcla de todas, con unas gotas de los misterios seriados que tanto se llevan ahora. Cuenta con un protagonista harto peculiar, que vuelve al trabajo después de pasar 12 años en la cárcel por un crimen que no cometió. Ahora, se guía por los mandatos del zen y ha adoptado unos heterodoxos métodos para resolver los casos, además de un gusto insaciable por la fruta. Ha de adaptarse a un mundo que siguió rodando sin él y, quizás, él continúa su marcha paralelo a ese mundo. Si hubiera que definirlo, podríamos decir que es una mezcla afortunada entre Earl Hickey, Brenda Johnson y, por el actor que le da vida, Gregory House.

Al igual que ocurre con el médico impertinente, Charlie perdería su sentido en manos de otro actor que no fuera Damian Lewis. Su jeta era la que más se quedaba grabada del extenso elenco de "Hermanos de sangre", y aquí se las arregla para que en Charlie haya siempre algo que se nos escapa. A pesar de su optimismo, queda una sombra que, muy probablemente, provenga de su convencimiento de que fue a la cárcel porque le tendieron una trampa (ya echaba yo de menos una buena conspiración), o tal vez por esa sensación de que está en el mundo sin estar en él realmente.

Para no dejarnos nada, Charlie tiene una compañera que debe supervisarlo y que tiene problemas con las drogas y el alcohol y, en la mejor tradición de Mulder y Scully, debe "espiarlo" e informar de todas sus faltas a una teniente que no tiene las manos limpias, precisamente. En el piloto apenas se nos muestra lo suficiente del crimen por el que Charlie fue condenado para que nos intrigue saber algo más, como qué ocurrió. Tampoco sabemos qué tipo de acuerdo devolvió a Charlie su vida, además de una millonada y una mansión que no desmerecería a Falcon Crest. En ir descubriendo esas piezas del puzzle reside parte de la gracia.

Música de la semana: Por fin he retomado "Aliens in America", y la selección musical viene directamente de las fantasías de Justin con una de sus compañeras de instituto, ambientadas al ritmo de Mika y su "Lollipop".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Acabo de descubrir esta serie, y ya me he "zampao" los nueve capitulos de un tirón.

Me stá gustando y mucho. La relacion de los dos policias, y sobretodo que nadie está limpio en esa comisaria. El que la compañera esté siempre a punto de derrumbarse, y la investigacion paralela de Charlie.

Y que, joder, me abre el apetito para comer fruta desde que la veo!. XDDD

Unknown dijo...

Charlie debe ser el policía con la alimentación más sana de la tele yanqui :-)
"Life" no me llamaba mucho en un principio, pero he leído por ahí tantas cosas buenas, que pensé que merecía la pena. De momento, apunta maneras.

Mariló García dijo...

Si tuviera que hacer una rapida eleccion, de todo lo nuevo que se ha estrenado quedaria en segundo lugar, sólo tras Californication.
es una mezcla entre CSI, con Psych, Me llamo Earl (por lo del karma) y Californication (por lo del CarpeDiem). Ella, a ver si la recordais, fue la ultima amante de Tony Soprano, la del peyote.